Eres única y no tengo ni idea de donde habrás salido. Pero no quiero que te vayas, quiero que alargues tu día hasta convertirlo y que los días lluviosos y grises se queden como una sombra muy lejana. Tu dices que no, que es imposible, que esa singularidad tuya es lo que te hace especial. Dices singularidad y no parece que quieras decir que te agobia estar con alguien. Lo dices, y parece hasta que la culpa es mía por querer alargar tu estancia en mi cama, como si fuese algo egoísta por mi parte... lo dices, y casi me siento culpable.
Esparce amor a dondequiera que vayas. No permitas jamás que alguien llegue a ti sin irse mejor y más feliz de como llegó.